Escrito por: Ing. Adrián Bustamante Blanco
El mundo gira en torno a sistemas de información que necesitan de personas que los resguarden. Los delincuentes informáticos buscan como obtener beneficios económicos y (o) dañar la integridad de las empresas y personas. Los datos de todos son valiosos para otros, un ejemplo simple es: para empresas que quisieran enviarnos publicidad.
El factor humano suele ser uno de los elementos más débiles de los implicados en un incidente de ciberseguridad, aunque no sea el único. El atacante suele aprovecharse de ello y, casi siempre, se sale con la suya. Por ende, la preparación en ciberseguridad es un tema fundamental en la actualidad, ya sea para proteger nuestros propios intereses o los de terceros.
La ciberseguridad no está de moda, sino que es una necesidad y lo seguirá siendo. Lamentablemente muchas empresas y personas se han dado cuenta de ello muy tarde y de una manera no deseada (posterior a un ataque).
Es necesario aumentar el conocimiento y concientización en esta área, tanto de usuarios, como de profesionales. Los profesionales debemos tratar de por lo menos conocer lo mismo que los atacantes, para poder responder, pero lo ideal sería estar un paso adelante.
En el mercado costarricense existen universidades y centros de capacitación que se han dado cuenta de ello, pero también en Internet podemos encontrar opciones gratuitas o muy económicas que nos pueden dar una base del conocimiento general en el área y evitar ser víctimas. Una buena capacitación en ciberseguridad debe ser completa (incluyendo no solamente aspectos técnicos, sino también legales), pero ajustada al nivel de los participantes. Mientras mayor sea el nivel, mayor debe ser la exigencia académica.
La ciberseguridad es indispensable hoy y lo será en el futuro. La preparación en buenas prácticas de seguridad tecnológica no es responsabilidad exclusiva del gobierno, de las universidades o de las grandes empresas, es algo que nos involucra a todos. No dejes la capacitación para mañana, porque la realidad nos indica que los ciberdelincuentes están por delante y debemos alcanzarlos para prevenir malas experiencias. Y si nos profesionalizamos en ello, nos aseguraremos una carrera de alta demanda.